Son interesados para deducir impugnaciones contra el acta de subasta, el ejecutante y el ejecutado, desde que son partes en el proceso; el comprador, ya que tiene un interés legítimo y directo en la validez del acto; aquellos que invoquen un derecho real sobre la cosa (condominio, acreedor hipotecario, usufructuario, etcétera, porque el remate puede afectar sus derechos) y eventualmente el tercero...

1. La regla general es que la adquisición del dominio opera por vía de la integración del “título” y el “modo”, que en el caso de la subasta judicial se cumplimentan respectivamente a través del auto aprobatorio y de la entrega de la posesión al adquirente. Pero para la oponibilidad a terceros es menester la inscripción registral de la subasta judicial de conformidad al art. 2505 del Código Civil....

“...Hasta que una vez aprobado el remate, es depositado integramente el importe de la compra y se pone en posesión al adquirente, no queda perfeccionada la venta efectuada en subasta judicial y por ende no es transmitida la propiedad de la cosa subastada, requiriéndose si se trata de inmuebles la pertinente inscripción para que la transmisión tenga efectos respecto de terceros...”....